Convertirse en padres primerizos implica recibir una gran cantidad de consejos, especialmente sobre el sueño de tu bebé. A menudo, la gente tiende a pensar que la formación del sueño es la única manera de lograr que tu bebé duerma bien por sí mismo. Como Especialista en Sueño y Bienestar Guiado por el Bebé, quiero compartir contigo 8 formas diferentes de ayudar a que tu bebé duerma mejor sin recurrir a la formación del sueño. ¡Vamos a echarles un vistazo!

¡Vamos a echarles un vistazo!
● Primero, ajusta el entorno de sueño de tu bebé. Cada bebé es único, así que experimenta con diferentes aspectos de su espacio para dormir para ver qué le ayuda. Ten en cuenta la temperatura, la luz y el ruido. Asegúrate de mantener una temperatura ambiente cómoda, expon a tu bebé a la luz natural durante el día y utiliza una máquina de ruido blanco para bloquear sonidos fuertes.
● Ahora, hablemos sobre la importancia de elegir el momento adecuado para las siestas y la hora de dormir. Observa las señales que te da tu bebé para saber si está demasiado cansado o no lo suficiente, como si se queja mucho o tiene problemas para calmarse. Ajusta los horarios de las siestas y la hora de dormir según sus necesidades.
● Establecer rutinas calmantes es otro punto clave. Las rutinas antes de dormir son esenciales para indicarle a tu bebé que es hora de dormir. Encuentra actividades relajantes que funcionen para él, como mecerlo, cantarle canciones de cuna o darle un baño tibio. Las rutinas consistentes crean una asociación positiva con el sueño y reducen el estrés.

● Es crucial investigar posibles problemas subyacentes que puedan afectar el sueño de tu bebé, cómo el frenillo lingual, la deficiencia de hierro o las intolerancias alimentarias. Consulta con profesionales para identificar y abordar cualquier problema subyacente.
● No te olvides de mejorar tus propios hábitos de sueño. Cuidarte a ti mismo mejorará tu capacidad para lidiar con la privación de sueño. Establece una rutina relajante antes de acostarte, evita la cafeína y los dispositivos electrónicos antes de dormir, y consume alimentos o bebidas que favorezcan el sueño. Prioriza el sueño siempre que sea posible.
● Mantente abierto a diferentes arreglos para dormir. Aunque la gente tiene ideas preconcebidas sobre dónde y cómo deberían dormir los bebés, es esencial entender que todos los bebés son diferentes. Algunos pueden preferir siestas cortas, mientras que otros pueden dormir mejor cerca de ti en su moisés. Haz lo que sientas que funciona mejor para ti y tu bebé.

● Considera las siestas diurnas una vez que tu bebé desarrolle un ritmo circadiano. Supervisa su sueño diurno para asegurarte de que no afecte su sueño nocturno y equilibra la cantidad de sueño diurno para promover tramos más largos por la noche.
● Finalmente, satisface las necesidades sensoriales de tu bebé. Cada bebé tiene necesidades sensoriales únicas, así que presta atención a signos de sobreestimulación o subestimulación y ajusta sus actividades diarias en consecuencia. Esto puede ayudar a reducir las batallas antes de dormir y durante las siestas.
Recuerda, existen formas alternativas de mejorar el sueño de tu bebé sin recurrir a la formación del sueño. Al ajustar el entorno de sueño, programar correctamente las siestas y la hora de dormir, establecer rutinas calmantes, abordar problemas subyacentes, mejorar tus propios hábitos de sueño, ser flexible, supervisar el sueño diurno y satisfacer las necesidades sensoriales, podrás optimizar la experiencia de sueño de tu bebé. ¡Dulces sueños para ambos!
